Apoyo a Migrantes en Huechuraba

Proyecto Apoyo a Migrantes en Huechuraba 2018-2019

Galería de Fotos de este Proyecto

La Parroquia Santa Inés de Huechuraba, a través de su Pastoral Social, emprendió en 2018 y hasta 2019, un proyecto de apoyo a migrantes haitianos que pretendía, especialmente, la mejoría en el dominio del idioma español, y algunos talleres de costura y confección, y de jardinería, además de ayuda social.

Este programa terminó con éxito cuyos resultados se resumen a continuación.

Beneficiarios.

Todos los alumnos son de origen Haitiano. El programa ha atendido a 34 personas (más 6 niños, hijos de los alumnos). Del total, 20 son mujeres y 14 son hombres. El rango de edad de los alumnos fluctúa entre los 20 años y 38 años. Si bien, la parroquia se encuentra inmersa en la comuna de Huechuraba, el flujo de asistentes a las clases ha traspasado la comuna, teniendo a la fecha, alumnos que provienen de la comuna de Huechuraba, Conchalí y Quilicura.

Clases de Español.

Este ha sido el objetivo principal del Proyecto. La mayor barrera para la integración social, comunitaria y laboral de las personas haitianas es el idioma.
Se ha utilizado material elaborado por el Servicio Jesuita Migrante (SJM), la Fundación Fre y de la Universidad de Chile. Este material está disponible en formato digital, por lo que para cada clase, se imprime y se les entrega a cada uno de los alumnos con el fin de que puedan reforzar los conocimientos entregados en sus hogares. EL material del SJM incluye 29 guías, el de la Fundación Fre 6 guías y el de la U de Chile 7 guías.
Los módulos de clases, tienen una duración de 2 horas, tres veces por semana, es decir, un total de 6 horas cronológicas semanales, las que se distribuyen de la siguiente manera: lunes y miércoles de 19:30 hrs. a 21:30 hrs. y los sábados de 16:00 hrs. a 18:00 hrs. Dentro del desarrollo de las clases, se agruparon los alumnos en tres niveles, de acuerdo al conocimiento del idioma español que cada alumno tiene y del periodo de incorporación a los cursos.
Nivel 1, corresponde al grupo más avanzado, el que cuenta con 10 alumnos; Nivel 2, nivel de conocimiento medio, 14 alumnos; y Nivel 3, nivel básico, 10 alumnos.
Se ha logrado un total de 34 asistentes a clases, los que han catastrado y de cada uno de ellos se ha elaborado una ficha con algunos antecedentes personales, educacionales, laborales y que detectan sus necesidades. Ese material está a disposición de la asistente social y de las coordinadoras del Proyecto para mantener información de las personas atendidas.

Canastas de Mercadería.

Esta iniciativa de entrega de canastas de mercadería, surge a partir de las necesidades detectadas en lo que refiere a la falta de recursos económicos. Cabe destacar, que en su mayoría de las parejas que asisten, solo uno de ellos trabaja, percibiendo el ingreso mínimo y viven en calidad de arrendatarios, Es por esto que aquellos que asisten periódicamente a las clases, tienen hijos, se les entrega una canasta familiar, que incluye alimentos no perecibles y en algunos casos pañales. Cada canasta tiene un costo de $20.000. De marzo a noviembre, se han entregado 144 canastas aproximadamente, 16 mensuales.

Entrega de Ropa y Enseres.

A través de la Parroquia Santa Inés de Huechuraba, se han recolectado gran cantidad de ropa (hombre, mujer y niños) y de enseres de casa para repartir entre las familias. La ropa recolectada, en general en muy buen estado, se limpia, clasifica y se entrega a familias de acuerdo a las necesidades registradas en las fichas de cada familia. Se han realizado entregas masivas de ropa y enseres cada 2 meses.
Dentro de los enseres más requeridos y entregados están: camas , cocinas, refrigeradores, lavadora , microondas, ollas, platos y cubiertos. Adicionalmente se han fabricado (carpintero haitiano) 4 repisas de madera para entrega a las familias más necesitadas de muebles para ayudar al orden de sus piezas. Para orientar a los participantes del Proyecto sobre su situación legal y sus opciones, se contactó a la Municipalidad de Huechuraba quienes han dado charlas de asesoría legal y de empleabilidad.

Apoyo al Empleo y Emprendimientos.

Este fue uno de los focos de trabajo con migrantes. Los alumnos han ido consiguiendo trabajos precarios, así han podido emplearse en bodegas, como jardineros, y las mujeres en casas particulares, o en comercios ambulantes. La principal actividad en el segundo periodo del Proyecto ha sido la creación de un taller de costura y también clases de gastronomía. Se compraron máquinas de coser, y con tres alumnas se han fabricado bolsas de compra de tela y pecheras. Estas se han comercializado en ferias de navidad en noviembre y diciembre. Los ingresos obtenido ha permitido pagarles una remuneración a las alumnas y financiar la compra de materiales. También se consiguió una importante donación de partes y piezas de bicicleta, y se evaluó con INFOCAP la posibilidad de implementar un taller de reparación y venta de bicicletas.

Encuentros Masivos.

Las principales actividades masivas han sido la Celebración de Fiestas Patrias, el 18 de septiembre se celebró junto a los alumnos y sus familias. El Día del Migrante, el que consistió en la elaboración y presentación de platos típicos a la comunidad, dicha actividad de se llevó a cabo en el salón de la parroquia, actividad abierta a la comunidad. Se celebró la Navidad con todas las familias Haitianas, actividad en la que se gestionaron regalos con la comunidad para los niños y mujeres.

Asistencia Social.

Se acompañó a un alumno en su cirugía ocular de cataratas, gestionada a través de la Fundación Oftalmológica Los Andes. Se realizó un operativo oftalmológico a los alumnos, midiendo presión ocular y se evaluó la necesidad de lentes. Esto lo realizaron tecnólogas médicas voluntarias. Se acompañaron a dos alumnas en sus partos en Hospital San José. Se gestionó diagnóstico y tratamiento para un niño nacido ciego en la Corporación CIDEVI. Se acompañaron a varias migrantes en sus controles hospitalarios post parto y de operaciones.

Conclusiones.

El trabajo de estos meses ha sido intenso y de aprendizaje. Se ha podido acompañar y ayudar en forma concreta y útil a cerca de 50 personas haitianas que lo han requerido. Se ha establecido confianza y al menos han tenido a un grupo de chilenos preocupados e interesados en ellos que les han dado apoyo, entregando cariño y acompañamiento en sus situaciones precarias de vida como migrante en una sociedad tan distinta de las cuales provienen. Se ha ido avanzando en el idioma, pero es insuficiente. Ellos requieren aprender más, pero debido a la necesidad de trabajar, se limitan sus tiempos para poder asistir periódicamente a clases, sumado a esto, se ha observado que además en lo que respecta a su entorno, habitan en comunidades, por lo que en la cotidianidad siguen hablando en su idioma. Mientras no dominen bien el español no podrán ni obtener mejores trabajos ni seguir estudiando. Es un círculo vicioso que hay que buscar romper. Hay algunos que ya llevan años y aún no tienen un nivel de idioma funcional.